En 2008 se adquirió un conjunto de bordados en oro que fueron sufragados por los voluntarios de la exposición Siervos,
imagen y símbolo del dolor, y ofrecidos a la Orden que los destinó a la
realización de las bambalinas del paso de palio que se inició al siguiente año.
Dada la gran calidad de las piezas se nos
aconsejó destinarlos para realizar nueva vestidura para la Virgen de los
Dolores.
Las piezas bordadas están realizadas en la técnica de hojilla y se pueden datar en la
segunda mitad del siglo XVIII. El diseño actual ha querido mantener en la
medida de lo posible el dibujo original de cada pieza, debiéndose de recomponer
cada una de ellas pues en el paño adquirido se encontraban dispersas y desordenadas. Tras una cuidada limpieza de
los bordados, se han pasado a nuevo terciopelo de seda en color negro. Trabajos que se han desarrollado
por un grupo de hermanos que han invertido más de seis meses en su pasado realizado con gran rigor y respeto
conservándose todos los hilos y restaurándose con hilos de las mismas piezas.